En invierno, la nieve es la protagonista de nuestras montañas, así que si sois fans del esquí alpino no dudéis en dedicar un día a esquiar en Grandvalira o en Vallnord, las dos estaciones de esquí del país. Además la nieve pone a vuestro alcance otras actividades como las excursiones en raquetas de nieve, los paseos en trineo tirado por perros (mushing) o los tours guiados en moto de nieve.
Y si queréis sentir cómo corre la adrenalina por vuestras venas, probad la experiencia de lanzaros en la tirolina de Grandvalira (Canillo) alcanzando una velocidad de hasta 80km/h o bajar por el tobogán de montaña más largo del mundo: el tobotronc de Naturland. Ambas actividades están disponibles durante todo el año.
No dejéis pasar la oportunidad de renovar vuestro armario con ropa de las mejores marcas o de comprar ese móvil o una cámara de última generación con la que sacar las mejores fotos de cada momento compartido. ¡Practicad el shopping en pareja y al mejor precio!
Después, contrastad el ambiente urbanita del centro con la inmensidad de la naturaleza y los espacios verdes que podréis observar desde el Mirador del Roc del Quer, en Canillo. Un impresionante mirador sobre el valle, con una pasarela transparente que te dejará sin aliento. ¡No os vayáis sin inmortalizar vuestro beso es este escenario de lujo!
Si os gustan los museos, no os perdáis el Museo Thyssen de Andorra: una galería de visita obligada para los amantes del mejor arte, especialmente de la pintura de los siglos XIX y XX, que podéis combinar con una entrada a Caldea. Arte y termalismo, cultura y relax… ¿Os animáis?
Si en vuestras cenas no puede faltar un buen vino, os proponemos visitar algunos de los viñedos del país. ¡Sí! En Andorra y más de 1.000m de altitud, se producen excelentes vinos de altura. Recorred los singulares campos de viña de alguna de las 4 pequeñas bodegas y disfrutad del producto final de estas micro-producciones. Un placer reservado para los paladares más exquisitos.