Los superalimentos están de moda. ¿Has oído hablar de ellos? Seguro que sí.
Se trata de productos altamente ricos en nutrientes que son muy beneficiosos para la salud y el bienestar. En este caso vamos a centrarnos en superalimentos que darán una inyección de hidratación a nuestro cuerpo, algo muy necesario en pleno mes agosto.
Lo mejor de estos superalimentos es que los vas a encontrar fácilmente en cualquier tienda o supermercado y que van a ayudarte a mantener un correcto nivel de hidratación aunque las temperaturas sean elevadas. Si es posible, te recomendamos que adquieras productos ecológicos: verás que su sabor suele ser más intenso aunque a simple vista su aspecto sea menos llamativo.
Seguro que te mueres de ganas de saber cuáles son estos alimentos milagrosos que, sin apenas esfuerzo, van a conseguir que tu cuerpo esté bien hidratado en verano. ¡Toma nota!
– Limón: un cítrico con un alto contenido de vitamina C, complejos vitamínicos del tipo B, calcio, hierro, magnesio, potasio y fibra. Su zumo natural diluido en agua es una bebida isotónica rica en flavonoides ideales para hidratarse y ganar energía.
– Sandía: la fruta de verano, de la que algunos nutricionistas dicen que es una fruta “buena para todo”. Es muy rica en agua y licopenos antioxidantes, y además está buenísima.
– Pepino: un alimento rico en agua, fresco y un estupendo aliado para la pérdida de peso. Además, aporta a nuestro organismo beta-sitosterol que ayudará a regular el nivel de glucosa en sangre y a mantener la energía constante.
– Miel: ¿a quién le amarga un dulce? Este endulzante natural es perfecto para las bebidas frías. También se puede tomar una cucharada en ayunas para aumentar la energía si baja la tensión a nivel del mar o si hemos dormido demasiado.
– Té rooibos: mucho más que una infusión. Esta bebida hidratante, es antioxidante y reconstituyente. Al no contener cafeína, podemos tomarla a todas horas sin miedo a perder el sueño.
En verano, nuestro ritmo de vida cambia drásticamente. El buen tiempo nos anima a realizar más actividades al aire libre y a estar más activos. Si a esto le sumamos un aumento de la temperatura y un mayor grado de humedad, el resultado es que nuestras necesidades de hidratación aumentan.
Es importante no esperar a sentir sed para tomar líquidos: cuando notamos nuestra boca seca ¡ya es un primer síntoma de deshidratación! Así que no esperes a tener sed para beber e intenta tomar unos 10 vasos a lo largo del día.
Como ves, mantener tu cuerpo bien hidratado en verano es una tarea fácil y accesible a todos. Bebe mucha agua, incluye los superalimentos que te recomendamos en tu dieta, y si te apetece, ven a descubrir nuestros talleres de batidos que te ayudarán a cuidarte desde dentro.