Durante el embarazo, el cuerpo de la futura madre experimenta muchos cambios que pueden comportar una cierta fatiga, estrés y hasta la aparición de algunos dolores.
Por suerte, tras pasar el primer trimestre y con el permiso de un médico, las mujeres embarazadas ya pueden tumbarse en una de nuestras camillas de tratamientos y dejar que durante 45 minutos nuestros expertos masajistas cuiden de ellas con nuestro masaje gravitas.
En CALDEA, usamos diversas técnicas de relajación para trabajar las piernas y la espalda de la mujer embarazada. Para potenciar los efectos del masaje, aplicamos en las extremidades un gel para activar la circulación y una crema bio en la espalda.
Como la mayoría de los masajes, este tratamiento consigue que la persona se relaje, desconecte y sienta como los niveles de estrés se reducen tanto durante su duración como tras haber acabado.
Gracias a los movimientos utilizados, la futura mamá notará como las molestias musculares o de espalda van desapareciendo y en los días siguientes al masaje verá como retiene menos líquidos. Además, los productos utilizados harán que la embarazada sienta sus piernas más ligeras y verá su piel mucho más suave e hidratada.
Todos estos factores se suman y comportan aún más beneficios: y es que al estar relajada la futura madre podrá dormir más y mejor y se sentirá menos fatigada tanto física como emocionalmente.
En definitiva, ¡un descanso bien merecido!
¡Ojo! CALDEA no es un centro médico, así que recomendamos que antes de venir a visitarnos o a disfrutar de uno de nuestros tratamientos, se consulte con un médico. Pero una vez dada la aprobación de un especialista, el tratamiento no supone ningún riesgo para la futura mamá o el bebé.
Tanto si vas a ser pronto mamá como si buscas un regalo para una amiga embarazada, el masaje gravitas de CALDEA es perfecto para ti.